La casa se ubica sobre un valle, ante un terreno rústico sin ninguna construcción, rodeado de naturaleza.Debido a la fuerte pendiente de la parcela el jardín se ha escalonado como un anfiteatro sobre las vistas mediante distintas plataformas o terrazas separadas por taludes de tierra y plantas. En la zona de día conviven la cocina, el comedor y el cuarto de estar, todo con una sensación de transparencia frente al paisaje a la vez que ofrece protección frente al ambiente marítimo de la zona. La zona de servicios se ventila e ilumina a través de un patio también lleno de vegetación que junto al valle dota al salón-comedor de una amplitud infinita. Se crea una zona de día a doble altura a la que el distribuidor de la parte alta de las habitaciones se asoma a modo de balcón.Todo el área norte quedaría protegida por árboles o arbustos tupidos, Arquitectura tradicional y moderna, estructura madera, tranquilidad, patio, arquitectura bioclimática, sostenibilidad