El diseño de planta abierta y en L la tuvieron muy clara desde el principio los propietarios además de los espacios abuhardillados con vigas de madera. Buscaban un estilo “farmhouse” o “estilo granja” que es en esencia un estilo rural, con sabor a campo y con un matiz muy acogedor, delicado y romántico.  La planta baja cuenta con áreas para comer, relajarse y descansar, además del dormitorio principal. Para ampliar visualmente y hacer más luminoso el acceso y las zonas comunes se abren huecos estratégicamente colocados para disfrutar de la vegetación y la piscina. Arriba, tres habitaciones con vistas al jardín y la piscina a través de las ventanas tradicionales en los muros. Además la planta alta también cuenta con techos inclinados de madera en los que se abren ventanas con vistas al cielo a modo de mirador de las estrellas por la noche, logrando un ambiente cálido, arropado y encantador.